Wilber Góchez/Ethelyn Veliz
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La Palabra Universitaria
José Luis Porras, un arquitecto que durante más de 40 de años ha forjado su carrera a base de esfuerzo, dedicación, calidad profesional y siempre con la filosofía de modernizar en el área, recientemente fue acreedor de un reconocimiento por la labor que en su carrera ha realizado.
Esa distinción, tal y como lo describe el experto, se suma a una cantidad innumerable de reconocimientos que durante su carrera ha recibido de parte de diversas instituciones, como universidades, asociaciones y gremiales que están muy relacionadas a la profesión de la arquitectura.
José Luis Porras, quien desde 2004 trabaja para la Universidad Tecnológica de El Salvador (UTEC) y quien actualmente se desempeña como coordinador del área de arquitectura, dice que la formación del arquitecto se ha vuelto integral, ya que busca no sólo formar las competencias técnicas, científicas, de análisis y síntesis durante su formación en la academia, sino que durante la misma el futuro profesional debe saber hacer muy bien el ejercicio práctico, es decir, ejecutar con sus propias manos el trabajo en el campo de acción.
“El profesional que formamos hoy en día lo hace con esa visión, saber hacer el trabajo práctico, diseñar y ejecutar”, dijo el reconocido arquitecto salvadoreño.
Según explicó a La Palabra Universitaria, entre los reconocimientos que ha recibido durante su carrea, ha habido algunos que lo han marcado y para él se han vuelto especiales, entre ellos mencionó el que recibió de parte de la Asociación Salvadoreña de Ingenieros y Arquitectos (ASIA), y del Colegio de Arquitectos de El Salvador (CADES), quienes de manera conjunta decidieron condecorarlo como el arquitecto del año.
“Ambas instituciones hacen entrega de esa distinción cada año, y lo hacen siempre en el marco del mes del arquitecto, sin saber una de la otra, las dos entidades me habían nominado para entregarme ese reconocimiento, así que cuando se compartieron la información y se dieron cuenta que habían coincidido, decidieron hacer un solo acto en el que ambas me hicieron entrega de ese inolvidable reconocimiento”, recordó entre risas.
Porras, quien ha pasado por varias facetas en su carrera profesional, aseguró que una de las mejores labores que el arquitecto hace es la tarea de enseñar, ya que según él, la docencia es una manera práctica de estar aprendiendo cosas nuevas todo el tiempo.
“Uno estudia todos los días, para luego poder enseñar o transmitir conocimientos”, puntualizó el reconocido arquitecto de la Utec.
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